Hojas amarillas por exceso de riego

Hojas amarillas fase de floración

Al pasear por el jardín, es posible que en algún momento descubras hojas amarillas en las plantas. Las hojas pueden contar una historia, y cuando amarillean, la planta no está produciendo suficiente clorofila. A medida que profundizas, las hojas también pueden decirte por qué.

Inclínate y observa más de cerca tu planta y la tierra que la rodea. Entre otras cosas, puedes detectar la aparición de plagas o determinar si está recibiendo demasiada o muy poca agua. Con una observación minuciosa, podrás localizar y tratar el problema más probable.

Los problemas de riego suelen ser la causa más común del amarilleamiento de las hojas. Cuando sus plantas reciben un riego excesivo, el rendimiento y el vigor disminuyen. El oxígeno se expulsa de la tierra, y las raíces simplemente se “ventilan poco” y se asfixian. Con poco aire, las raíces empezarán a ahogarse y pudrirse. El riego excesivo también provoca diversas enfermedades fúngicas.

Comprueba el nivel de humedad de la tierra. Cava unos centímetros cerca del tallo de la planta. Coge un pequeño puñado de tierra y exprímela. Si está húmeda o fría al tacto, no necesita más agua por el momento.

¿Cómo se arreglan las hojas amarillas por exceso de riego?

Hojas Amarillas + Desvaneciéndose a Verde + o Amarillo Brillante =

Estos síntomas juntos significan que su planta está regada en exceso. Normalmente las hojas inferiores caen primero, aunque toda la planta puede verse afectada. La solución = trasplantar (para eliminar la tierra empapada) y regar menos, o dejar que la tierra se seque y regar menos.

¿Se recuperarán las hojas amarillas regadas en exceso?

Si la hoja se ha puesto amarilla por exceso de riego, es muy poco probable que vuelva a ponerse verde. Lo siento. Confuso, ¿verdad? Las hojas que no se riegan lo suficiente pueden amarillear y volverse marrones, pero tanto si se riegan en exceso como si se riegan demasiado, es poco probable que vuelvan a reverdecer.

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Desde el salón hasta el paisaje, las plantas de hojas verdes alegran el día y embellecen el mundo. Pero a veces, a pesar de sus esfuerzos, las hojas de las plantas amarillean. El amarilleamiento, conocido como clorosis, se produce cuando algo interfiere con la clorofila de la planta, el pigmento que está detrás de su hermoso color verde. La buena noticia es que las hojas amarillas indican que las plantas necesitan ayuda. Leyendo las señales y tomando las medidas adecuadas, puedes poner remedio a las hojas amarillas y evitar que vuelvan a aparecer.

Los patrones amarillos de las hojas cloróticas son indicios de deficiencias de nutrientes.Drenaje deficiente o riego inadecuadoLos problemas con el agua, ya sea por exceso o por defecto, son la principal causa de las hojas amarillas. En un suelo demasiado húmedo, las raíces no pueden respirar. Se asfixian, se cierran y dejan de suministrar el agua y los nutrientes que necesitan las plantas. La sequía tiene un efecto similar. Con muy poca agua, las plantas no pueden absorber los nutrientes esenciales. El resultado son hojas amarillas.

Para solucionar o prevenir los problemas de agua, empieza por un suelo poroso y con buen drenaje. Si cultivas en recipientes, elige macetas con buenos agujeros de drenaje y mantén los platillos libres de exceso de agua. En su jardín, evite plantar en lugares donde se acumule el agua de lluvia o de riego. Incorpora al suelo materia orgánica, como compost, para mejorar su estructura y drenaje.

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El amarilleamiento de las hojas es uno de los grandes misterios del cuidado de las plantas de interior, pero también es uno de los más comunes. Las hojas de las plantas de interior pueden amarillear por problemas de riego, salinidad y clima. También pueden ponerse amarillas cuando sufren infestaciones de insectos u hongos. A continuación le explicamos por qué sus plantas se vuelven amarillas y cómo solucionar el problema.

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Según la empresa de recursos agrícolas IFA, “los problemas de riego son la causa más común del amarilleamiento de las hojas”. Los signos de exceso de riego incluyen “[hojas] de color amarillo parduzco que han empezado a marchitarse”. IFA señala que “parecerán flácidas o tendrán un tacto blando” y que “pueden aparecer manchas negras y bultos en tallos y hojas”. Las plantas regadas en exceso se vuelven perezosas, producen menos hojas y expulsan el oxígeno del suelo. Esto puede dar lugar a lo que la IFA denomina raíces “insuficientemente aireadas”. Las raíces insuficientemente aireadas acaban asfixiándose y pudriéndose. El riego excesivo también puede provocar una serie de enfermedades fúngicas en las plantas de interior.

Por el contrario, las hojas amarillas que empiezan a enrollarse suelen deberse a la sequedad del suelo. Si riega la planta, el problema se resolverá en unos días o una semana. The Sill recomienda trasplantar la planta en este caso y regarla menos con el tiempo para dejar de matar a la planta de interior.

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Jon VanZile es un maestro jardinero que escribió contenidos para The Spruce durante más de una década. Es autor de “Plantas de interior para un hogar saludable”, y sus escritos también han aparecido en el Chicago Tribune, y Better Homes & Gardens, entre otros. Jon empezó a coleccionar plantas hace más de 10 años y mantiene una creciente colección de plantas raras y tropicales.

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Sonya Harris es una galardonada experta en jardinería con dos décadas de experiencia enseñando y compartiendo sus amplios conocimientos sobre jardinería de espacios reducidos. Es maestra jardinera y fundadora del galardonado Bullock Garden Project de Nueva Jersey. Sonya ha escrito para el sitio de Martha Stewart Living, ganó el premio One to Watch de la revista South Jersey Magazine y también es miembro de la Junta de Revisión de Jardinería y Cuidado de Plantas de The Spruce.

Las hojas amarillentas de las plantas de interior son frustrantes. A veces la causa es obvia, lo que significa que puede diagnosticarla y solucionarla inmediatamente. Otras veces, el problema es un misterio. En estos casos, tendrás que intentar cambiar una cosa a la vez hasta que veas una mejora en tu planta.

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